lo que hay que oír
Hoy estuve en los minutos iniciales de una conferencia acerca de los derechos humanos y seguridad. Cuando escuché que el ponente informó que esperaba no torturar mucho al público con una charla demasiado extensa, no pude aguantar la risa y salí volando de ahí.
Plop, diría Condorito.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario